Entra por tus pies.
Serpentea por tus piernas.
Hierve en tus caderas.
Y abraza con fiereza.
Es el tornado imparable que prende tu chispa adecuada;
el fuego que se adueña de tu vientre,
la llama que tu ombligo reconoce,
la mecha que te enciende acaparando el oxígeno de tus pulmones.
Crea hogar.
Caldea a quien se acerca, abrasando a quien se pasa.
Y es padre de una de las hijas que, repudiadas y reprimidas durante siglos, te hará arder de vida, colmarte de deseos y conectar contigo, con tu voz interna y con lo que de verdad quieres para ti.
Él es tu FUEGO, creando tus realidades.
Ella es tu IRA, invitándote al lodazal.
Y no, no te falta ná.
🌬🔥💥
Se vienen cositas (y nuevo sarao) con este señor de la naturaleza y esta gran señora de la vida, como es habitual, en las Cartiñas: